Morelia, Michoacán
El candidato a la alcaldía de Morelia, Alfonso Martínez, eligió una antigua foto donde aparece de niño junto a sus hermanos y su madre, para compartirla en redes sociales en el marco del Día del Niño, una tradición que replicaron varios otros políticos y candidatos.
Y en entrevista, el abanderado del Partido Acción Nacional (PAN) y del Partido de la Revolución Democrática (PRD), hoy de 48 años de edad, confesó algunos pasajes de su infancia y de la referida foto.
“Le pedí a mi mamá que me buscara una foto de mi niñez y me mandó como ocho o 10 fotos y elegí esa para publicar. Le dije a mi madre: ‘fijate lo que son las cosas: tú tienes las fotos de mi historia de niño, que yo les tomo a mis hijos en un día’. Ya hoy en día estás tomando fotos para todo”, comentó.
Durante el programa Casilla 24, el edil con licencia detalló que en la imagen aparece junto a sus cuatro hermanos y a su madre.
“Fuimos puros hombres, son de las pocas fotos que tenemos. Soy de una familia de morelianos donde faltaron ahora solamente mi padre y mi hermano el más chico, José Antonio, que falleció en diciembre pasado y mi padre falleció hace tres años en la pandemia”, rememoró.
Martínez transportó su memoria varias décadas atrás, para recordar que su mamá ‘era como un gendarme’ por la disciplina que imponía a sus cinco hijos varones, pero aún así, el niño Poncho siempre halló la forma de escaparse para consumar alguna travesura.
“Vivíamos en el bulevar García de León, fuimos de las primeras casas ahí. Era sólo un lado de calle, porque enfrente había un río natural y después se hizo drenaje. Yo me le escapaba a mi mamá para salirme, porque por ahí pasaban vacas y chivas, pero un día me perdí, ya no supe como regresar, te estoy hablando que tenía como cinco años.
“Me asusté, empecé a llorar y una señora me vio y me ayudó a regresar. Esa vez me llevé mis nalgadas. Otra travesura que hice es que, por ahí pasaba el (camión de la ruta) Alberca y alguien me dijo que esos camiones le daban la vuelta a toda la ciudad, en una hora. Costaba un peso con 50 centavos y me subí, pero ya no hallaba qué hacer, porque tardó mucho en dar la vuelta”, narró el ahora candidato a reelegirse para gobernar Morelia y su aproximadamente millón de habitantes.
“Morelia fue siempre una ciudad muy pacífica, muy tranquila, y en general México, pero hoy estamos muy angustiados por saber nuestros hijos a dónde van, dónde están”, admitió quien, de niño, iba y regresaba caminando sin riesgos de la escuela primaria donde estudió: la Enrique García Gallegos, ubicada en la Nueva Chapultepec.