Por Christián García | CDMX
Al menos una veintena de ataques se dispararon las dos candidatas a la Presidencia de México, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez. De ´fría y sin corazón’, ‘mentirosa’ y ‘corrupta’ no se bajaron.
La abanderada del PRI, PAN y PRD abrió las hostilidades en el primero de los 120 minutos que duró el debate convocado por el Instituto Nacional Electoral, la noche del domingo; el primero de tres.
“Eres una mujer fría y sin corazón. Eso te define completamente”, soltó Gálvez al recordar los 26 muertos – 19 niños y siete adultos – cuando un temblor colapsó el edificio del Colegio Rébsamen, un año después de que supuestamente Sheinbaum había tenido en sus manos un peritaje de protección civil, donde procedía su clausura.
Para Xóchitl, eso fue negligencia criminal y no se la perdonó a su contrincante en el debate.
La embestida arreció en las siguientes intervenciones, como cuando también acusó a la morenista de haber atendido a pacientes de covid con un tratamiento basado en medicina para eliminar piojos; ‘¿cómo es posible que hayas permitido tratar a seres humanos como animales de laboratorio?’, le increpó a la abanderada de Morena, PT y PVEM.
Sheinbaum, favorita en las encuestas, se subió al ring. En todo momento se refirió a Gálvez como ‘la candidata del PRIAN’ y la tildó de mentirosa.
“La verdad es que dice muchas mentiras (…) Dijo que iba a donar su departamento al Colegio Salesiano; no solamente no lo donó, sino que lo vendió a la sobrina de Felipe Calderón por millones de pesos”, sostuvo, gráfica en mano.
En respuesta, Xóchitl aseguró: “Claudia, la prueba que presentas es más falsa que tu acento tabasqueño”. Y las expresiones, en ese tono, continuaron durante el resto del debate.
Incluso, Sheinbaum señaló como dato de lo que representa cada una de las candidatas, la casa donde viven en la Ciudad de México: ‘yo vivo en un departamento, ella vive en una casa del Cártel Inmobiliario’, sintetizó.
Xóchitl respondió con cuestionamientos sobre los saldos que deja el gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador en materia de combate a la corrupción, la mayor bandera del tabasqueño.
“Claudia, la verdad el presidente te dijo ‘corcholata’, pero lo que quiere es que seas tapadera de los sobres amarillos, de la casa gris, de la corrupción de Segalmex, de la corrupción de Rocío Nahle, de la corrupción de los hijos y amigos del presidente, de las casas de Bartlet; eso es lo que el presidente realmente quiere contigo”, disparó la originaria de Hidalgo.
Y remató con el caso de la Línea 12 del Metro, cuyo colapso también causó 26 muertes durante el gobierno de Sheinbaum: ‘eso también se llama negligencia criminal (…) y sigues siendo fría sin corazón; yo te llamaría La Dama de Hielo, porque no veo cómo ni siquiera te atrevas a voltear’ – le dijo a la candidata de Morena.
Cuando si volteó Sheinbaum, fue cuando Gálvez la retó a decir si investigaría a los hijos de López Obrador: ‘sí, si tiene pruebas que las presente ante el Ministerio Público’, atajó.
Al final, ambas candidatas se declararon ganadoras. Al final, una de ellas será la primera mujer Presidenta de México, si algo extraordinario no sucede en lo que resta de aquí a las votaciones.
Al final, ninguna se distrajo con Jorge Álvarez Máynez, el candidato de Movimiento Ciudadano. Pero, aún con la indiferencia de sus contrincantes mujeres, el candidato de ‘lo nuevo’ nunca perdió la sonrisa.
Él también se declaró vencedor.
