Morelia, Michoacán
Michoacán acumuló cuatro elementos del Ejército Mexicano fallecidos esta semana, víctimas de la explosión de minas sembradas por la delincuencia en caminos rurales y en zonas serranas.
Uno de los artefactos estalló el lunes 16, cuando soldados recorrían un terreno donde habían ubicado un campamento relacionado con grupos delictivos en el municipio de Cotija, en los límites con Jalisco. Ahí murieron dos militares y cinco más quedaron heridos.
Entre los heridos iba un Mayor, quien estaba al frente de la operación desplegada en esa zona donde también, previo al estallido, los soldados habían descubierto los cuerpos de tres personas sin vida.
Otra mina estalló la noche del martes 17, cuando elementos del Ejército recorrían la comunidad Las Paredes del Ahogado, municipio de Buenavista, en la región de Tierra Caliente.
En ese evento perdieron la vida otros dos militares, de acuerdo con el reporte de autoridades.
Se trata de la peor semana para el personal castrense, en materia de bajas por tácticas criminales en los poco menos de tres meses del gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum.
De hecho, el Secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla, reconoció el pasado lunes que en los seis años del ex presidente Andrés Manuel López Obrador solamente hubo seis soldados fallecidos por este tipo de artefactos explosivos de la delincuencia.
Eso equivale a un promedio de un militar por año; en Michoacán, murieron cuatro en cuestión de horas.
